Granada, mundialmente conocida por la majestuosa Alhambra y su legado andalusí, guarda otro secreto tan fascinante como su historia: su litoral. Desde la animada Costa Tropical hasta pequeñas calas resguardadas por acantilados, sus playas combinan belleza natural, cultura local y experiencias para todos los gustos. Un viaje por este litoral es una invitación a perderse entre sabores, paisajes y el rumor constante del mar.
La Herradura, forma perfecta para sumergirse
Con su característica forma de herradura que le da nombre, esta playa situada en la localidad homónima es una de las más icónicas de Granada. Sus aguas cristalinas y su rica vida marina la convierten en un paraíso para buceadores y amantes del snorkel. El ambiente se completa con chiringuitos donde el espeto y la cerveza fría saben a gloria frente al mar.
San Cristóbal, esencia familiar en Almuñécar
Situada en pleno corazón de Almuñécar, esta playa es ideal para disfrutar en familia. Con más de un kilómetro y medio de longitud, ofrece arena gruesa, aguas tranquilas y todos los servicios necesarios para una jornada perfecta. Su animado paseo marítimo invita a recorrerlo entre tiendas, heladerías y terrazas con vistas al mar.
Cantarriján, libertad entre acantilados
En el corazón del Paraje Natural de los Acantilados de Maro-Cerro Gordo, Cantarriján ofrece una experiencia más íntima y salvaje. Famosa por su carácter naturista, esta cala rodeada de vegetación y formaciones rocosas es perfecta para desconectar. El acceso en verano se realiza mediante un servicio de lanzadera que ayuda a conservar su entorno virgen.
Calahonda, sabor a mar y tradición
Ubicada en el municipio de Motril, Calahonda destaca por su ambiente marinero, su puerto pesquero y sus aguas claras, perfectas para nadar. Es también un destino habitual para los amantes del paddle surf y el windsurf, que encuentran aquí condiciones óptimas para practicar. Y cómo no, su gastronomía basada en el pescado fresco es otro de sus grandes atractivos.
La Rijana, una joya para los exploradores
Entre Castell de Ferro y Calahonda se encuentra esta pequeña cala escondida, un tesoro para quienes buscan tranquilidad y belleza natural. Su acceso, algo más desafiante, se ve recompensado con unas aguas limpias y un entorno que invita a sumergirse –literal y emocionalmente– en el Mediterráneo más puro.
El Muerto, serenidad y desconexión
A pesar de su nombre poco convencional, la Playa El Muerto en Almuñécar es un rincón frecuentado por quienes buscan paz y naturaleza en estado casi salvaje. Su acceso requiere caminar por un sendero, lo que garantiza una atmósfera tranquila y sin aglomeraciones. Es también una playa con tradición naturista.
El mar como nunca lo habías sentido
Las playas de Granada son mucho más que arena y sol: son cultura, historia, libertad y autenticidad. Ya sea para una escapada tranquila, unas vacaciones activas o simplemente para contemplar el horizonte, este tramo del Mediterráneo andaluz ofrece rincones que quedan en la memoria. Descubre, respira y déjate llevar por el encanto único de la costa granadina.